Los municipales nucleados en la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) endurecerán esta semana su reclamo de apertura de paritarias, para finalizar con un paro. Sostienen que la inflación ya licuó el 25% que otorgó por Decreto el Ejecutivo y que la mayoría cobra el mínimo garantizado de $32.000. «Lamentablemente ante el silencio del ejecutivo no nos están quedando más opciones que llevar la pelea a la calle», dijo a Río Bravo la trabajadora municipal y referente del sindicato Malena Turello.
Tres meses después del aumento otorgado por el municipio, los trabajadores nucleados en ATE comenzaron a pedir la reapertura de las paritarias. Es que, aseguran, la inflación acumulada se comió el la suba. Por eso, la semana pasada, tras una serie de asambleas en distintas reparticiones, hicieron retención de servicios y una concentración frente al Palacio Municipal con corte de calle y, para esta semana, anunciaron un endurecimiento de las medidas de fuerza que tendrá su pico el viernes con un paro sin concurrencia a los lugares de trabajo.
Aunque desde la secretaría de Hacienda de la Comuna les piden paciencia, advierten que no hay mucho margen: «La verdad es que nos cuesta mucho ya, hemos tenido bastante paciencia. Creo que ya es momento de que se nos den las necesarias y justas respuestas; todas las obras que el mismo municipio anuncia se sostiene y se realizan con el trabajo y el esfuerzo de los mismos trabajadores municipales que hoy no están siendo reconocidos», dijo Malena Turello, vocal del Consejo Directivo Provincial de ATE y trabajadora municipal.
La dirigente del sindicato estatal aseguró que llegaron a esta situación luego de agotar las vías diplomáticas y no obtener respuesta alguna. Y ponen los números sobre la mesa: «Hoy el salario mínimo garantizado de un trabajador municipal está hoy en 32.000 pesos contra una canasta básica de alrededor de 67.000». Ese mínimo, resaltan desde el gremio, es el haber de la mayoría, comprendidos entre la categoría 1 y 19 del escalafón municipal.
Por otro lado, denunció que el municipio «viene incumpliendo su palabra en relación con el pago de las recategorizaciones adeudadas, lo cual es una obligación porque eso está regulado por una ordenanza municipal, y las actualizaciones de los salarios familiares, que al día de hoy el hijo de un trabajador municipal vale medio hijo (sic)».
«Eso da una idea de la situación en la que estamos viviendo los trabajadores, eso sin haber dejado de trabajar durante la pandemia, porque más allá de los servicios que es lo que la ciudadanía percibe, ninguna de las áreas municipales dejó de trabajar, a veces no en las mejores condiciones de acuerdo a los protocolos pero sostuvimos el municipio».
Por eso, el próximo jueves volverán a realizar una retención de servicios y se movilizarán a las 9 para concentrar en Cinco Esquinas, mientras que el viernes realizarán paro sin concurrencia a los lugares de trabajo. «Lamentablemente ante el silencio del ejecutivo no nos están quedando más opciones que llevar la pelea a la calle. Es la necesidad imperiosa de los trabajadores de hacer escuchar la demanda más que legítima», argumentó le dirigente de ATE y trabajadora municipal.
FUENTE:(QUESABESDIGITAL)
