La entidad señaló que la medida «apunta a un manejo de tasas de interés que potencien el ahorro y el financiamiento en pesos».
El directorio del Banco Central (BCRA) dispuso este jueves una nueva baja de la tasa de política monetaria al recortar el rendimiento del interés de las Leliq en cuatro puntos, pasando de 48% a 44% nominal anual, lo que constituye la más baja desde hace un año.
La medida implica una acumulación de 19 puntos de recorte en el rendimiento de las Letras de Liquidez (Leliq) desde la asunción de la nueva gestión del Central, a cargo de Miguel Pesce, al pasar del 63% al actual 44%.
Por otra parte, se trata de la tasa de política monetaria más baja desde el 14 de febrero de 2019, cuando la licitación diaria para las Leliq había sido de 43,93%, durante el período de flotación del dólar entre «bandas» dispuesto por la gestión de Guido Sandleris.
«La decisión fue adoptada tomando como referencia la consolidación de la desaceleración inflacionaria», informó la autoridad monetaria en un comunicado, luego de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) comunicara esta tarde que la inflación de enero fue de 2,3% mensual.
La decisión fue adoptada tomando como referencia la consolidación de la desaceleración inflacionaria”
COMUNICADO DEL BANCO CENTRAL
La nueva tasa de política monetaria regirá a partir de la próxima licitación de las Letras de Liquidez, que se realizará el próximo martes, 18 de febrero.
«El Directorio del BCRA apunta a un manejo de tasas de interés que potencie el ahorro y el financiamiento en pesos, preservando a la vez el equilibrio del mercado monetario», aseveró el Central.
El recorte de este jueves se suma a la modificación del 21 de enero, cuando se aplicó un cambio en la frecuencia de las subastas de Leliq, que pasó de ser diaria a realizarse cada 7 y 14 días, por lo que la tasa de referencia en términos efectivos se ubica en 54% anual.
Al respecto, el BCRA afirmó entonces que la extensión de los plazos «redundan en una baja de la tasa de interés de referencia en términos efectivos, mejorando también las expectativas con respecto al desempeño de la tasa de política monetaria y favoreciendo un control más eficiente de las condiciones de liquidez».