Quizás hubo situaciones similares anteriores, pero la primera falsificación de mi firma encontrada por mí fue cuando mi madre y mis hermanos, uno de ellos hoy funcionario de la plana mayor del gobierno macrista, la designaron a ella como administradora de los bienes familiares durante el proceso sucesorio devenido tras la muerte de mi padre. En otros términos, decidieron por mí, todo un modo de borrarme de la familia: falsificación de identidad.
Por razones de dignidad personal y social no tendría caso renunciar a mi filiación aún cuando los lazos con mi familia de origen estén definitivamente rotos. El objetivo de estos posteos es no solo recuperar mis derechos sino también que nadie me considere partícipe de maniobras delictivas premeditadas por mis hermanos y mi madre. Contar la verdad en estos posteos que hoy empiezan, es el primer paso, además de las acciones legales, para recuperar mi historia y mis derechos.
Dolores Etchevehere, periodista.
fuente:(quesabesdigital)